Riesgo son aquellas eventualidades que imposibilita el cumplimiento de un objetivo. Así definido, un riesgo conlleva dos tipos de consecuencias: ganancias o pérdidas. En lo relacionado con tecnología, generalmente el riesgo se plantea solamente como amenaza, determinando el grado de exposición a la ocurrencia de una pérdida (por ejemplo el riesgo de perder datos debido a rotura de disco, virus informáticos, etc.).
Los riesgos en auditoría pueden clasificarse de la siguiente manera:
Riesgo inherente: Cuando un error material no se puede evitar que suceda por que no existen controles compensatorios relacionados que se puedan establecer.
Riesgo de Control: Cuando un error material no puede ser evitado o detectado en forma oportuna por el sistema de control interno.